17/2/09

All Star de pacotilla.

Buenos días a todos. Me encuentro en Girona, entre clase y clase. Día frío, pero soleado.
Renuevo por miedo a abandonar mi bloc y dejarlo en el más puro ostracismo.
Hoy voy hablar del All-Star de ese fin de semana. Me ha sido imposible plasmar de una mejor forma lo que ha sucedido en Phoenix. Tristísmo fin de semana en un intento desesperado de esa empresa llamada NBA por competir ante la otra gran empresa llamada Superbowl.

Desmenucemos este "finde" deportivo por partes.

Partido de rookies y sophomores. Poca cosa a comentar, el partido fue sobre lo previsto y los novatos no supieron como contener a los de segundo año. Si no hubiera sido por un jugador de segundo año me hubiera quedado completamente dormido. Ese jugador se llama Kevin Durant. Ya no fue solo por los 46 puntazos que hizo, sino por su juego: técnica y táctica personificadas en un jugador. Como dijo Santiago Segurola en sus rutinarias conversaciones en MARCA.com, Durant jugó el partido equivocado. Para mí tiene la clase suficiente como para jugar el partido de las estrellas y lo va a jugar porque dentro de cinco años será junto a James el mejor jugador de la NBA. De momento juega en los Thunder Oklahoma, la nueva franquicia. Ya veremos el año que viene... a mi me da que se lo llevará un grande.
En lo que españoles se refiere, Rudy y Marc Gasol estuvieron en su onda: haciendo puntos y dominando el aro, respectivamente. Sus entrenadores tienen que estar orgullosos de ellos: sorprenden.


Concurso de mates y triples. Primero vamos a por los triples que aunque haya menos para contar, no fue menos penoso que el concurso de mates. Ayer lo comentaba con un amigo, y es que no logro entender cómo es posible que un jugador que va a un All-Star weekend compitiendo en triples lo haga tan mal! Daequan Cook fue el nombre del ganador. Atrás quedan grandes ganadores (sí, los auténticos) como el legendario bostoniano Larry Bird o Pedja Stojakovic, de la escuela europea, el primer europeo en ganarlo en 2002. Y es que en la NBA cada vez menos se entrenan menos los fundamentos, y por eso el baloncesto europeo está cada vez más cerca del americano.
Los mates fueron decepcionantes. Tengo que admitir que me dormí. Rudy lo hizo muy bien, pese a los dos fallos que tuvo. Los dos mates fueron alucinantes y sorprendentes, sobre todo el primero que él se lo guisó y se lo comió solito. Los otros tres participantes estuvieron bien, sobre todo Robinson, el más increíble y el que ganó merecidamente. Howard? Un jugador sobrevalorado que no sabe explotar sus habilidades y que es famoso solo porque le llaman Superman. Qué insulto a ese personaje ficticio al compararlo con un jugador que solo tiene músculo y que es de lo más irregular que han visto mis ojos.
Sorprendentmente quedó por delante de Rudy. En Estados Unidos se han quejado siempre, y con razón, que un Presidente negro nunca podía ocupar la Casa Blanca, pero aún no han aprendido que un jugador blanco puede llegar a ser mejor que el peor de los jugadores negros en lo que mates se refiere. El chocolate blanco aún no triunfa comercialmente en Estados Unidos.
Por cierto, mucho más penosa es la cultura americana que desconoce quien fue Fernando Martín y se reían de Rudy alegando que Martín era el cantante Ricky Martín. Penoso.


El partido de las estrellas. No sé qué decir. Suerte que no me levanté para verlo porque no hubiera valido la pena. Estrellas sin saber jugar en equipo, solo al contraataque y con individualidades. Lo más sorprendente de la noche fue el baile que se pegó Shaq antes de que empezara el partido, todo lo demás fue puro sebo comercial. Atrás, muy atrás, quedan las pugnas entre Magic y Jordan, Jordan y Bird o Bird y Kareem Abdul-Jabaar.
Y es que ciertamente los jugadores convocados para ese partido son estrellas; muchas de las cuales jugaron aquella finalísima de los JJOO defendiendo la camiseta de Estados Unidos frente a España. Lebron James no imprimió el carácter que acostumbra a hacer con los Cavalliers; Kobe Bryant estuvo bien, sólo bien; Howard debió tener un pajarón a lo largo de ese finde (quizás es el récord Guinness de los pajarones); Shaq hizo un caño y pecó de abusar su juego de arrastre, cosa que denota que es viejo y ya sin recursos; Pierce desaparecido, esperaba más de él.

Gasol estuvo genial por el tiempo que jugó. Para mí fue el que puso más carne en el asador y el que hizo más méritos para el MVP. Pero ya se sabe, no le dejaron jugar lo suficiente y las "vacas sagradas", aquellas que a veces dejan jugar pero que a veces "joden un huevo", le quitaron protagonismo. El voto del aficionado hizo que Ming jugara de pívot titular.
Sinceramente no quiero que se me malinterprete... no estoy pecando de chovinismo, pero no es posible que la gente pueda elegir el equipo por votación popular. No nos engañemos, Yao Ming no es mejor que Pau Gasol quién ya está a la altura de los Duncan y Garnett, por lo que mereció ser titular. La prueba? Muy fácil, me remito a la espectacular remontada de los Lakers desde que fichó al catalán: más defensa, más colocación, más agresividad, más rebote, más ataque... Los Odom y Bryant juegan sin miedo a fallar en tiros y como le dijo Bryant a Gasol en un partido ante los Celtic: "Pau, recuerda que eres uno de los mejores del mundo".

Me pregunto si cuando Pau gane el anillo le convocaran como titular para el All-Star. La respuesta? El año que viene en el All-Star de Dallas. Esperemos que sea mucho mejor que el del pasado fin de semana. A todo eso, me olvidaba!... el MVP fue compartido entre Bryant y Shaq y el equipo del Oeste arrolló al Este.



Pau Lladó i Rebull ©

1 comentari:

Unknown ha dit...

America para los americanos dijo un patriota. Está claro qhemos entrado en su circo, pero de momento, nos relegan a un segundo plano. Lástima de comercio el All Star; yo vi el partido y daba un poco de vergüenza ajena ver todo el desperdicio que se amontonaba en la pista. Con decir que el bailecito que se marcó el "MVP" será lo que se recordará de este fin de semana de las estrellas...

Eso es explotar un negocio y lo demás son tonterias